De las personas que viven de alquiler, un 40% se ha visto obligados a esto, ya que su estado económico no lo permite adquirir un inmueble
Dentro de las personas que viven de alquiler, un 40% se han visto obligados a acudir a esto, ya que su estado económico no le permite adquirir un inmueble. Esto muestra la relación existente con el régimen de propiedad dentro de la sociedad española.
A pesar de este porcentaje, el restante se ha decantado el arrendamiento como método para vivir. Con la solvencia económica para poder apropiarse de una casa o de un piso, deciden decantarse por el alquiler.
Para ello, hemos realizado un análisis acerca de los motivos y principios que han llevado a estas personas a elegir el alquiler como modo de vida. Dentro de este estudio, se concluye 4 razones principales por los que este porcentaje de arrendatarios se decantan por dicha operación:
Para este sector de la sociedad, el arrendamiento les supone menos preocupaciones que si comprasen una vivienda. Preocupaciones como impuestos, reformas o reuniones de propietarios. Con el alquiler, estas preocupaciones se las trasladan al dueño de la vivienda, mientras que ellos se desentienden de ellas.
Los usuarios a favor del alquiler dudan de la rentabilidad que se pueda obtener al invertir en una vivienda. Después de 20 o 30 años, la cuantía económica destinada a gastos como la hipoteca de la vivienda, las derramas, las reformas, el IBI, la comunidad, los seguros o las remodelaciones? es mucho más elevada que la cantidad destinada en ese mismo tiempo a únicamente el alquiler.
Aquellos que se decantan por el arrendamiento y no han destinado una parte de sus ingresos a invertir en un inmueble, sienten que poseen menos limitaciones y restricciones, pudiendo destinar esa inversión a otros asuntos como ocio, formación de sus hijos, viajes o cualquier otro motivo que ellos escojan libremente.
Esta mayor flexibilidad es la que permite a estas personas adaptar el alquiler a cada situación de su vida. De esta forma, si tienes que cambiar de trabajo o tus circunstancias personales cambian, puedes elegir qué vivienda se adapta mejor a tu nueva situación profesional y personal. Tu vivienda es la que se debe adaptar a tu vida y no tu vida la que debe adecuarse al inmueble que poseas.
A diferencia de otros países europeos, la sociedad en España no suele moverse al extranjero a la hora de encontrar trabajo. Independientemente del motivo, estamos más anclados al territorio, ya sea por amor a la cultura española, al país, al clima, a las costumbres?
A pesar de ello, hay una parte de la sociedad que ven a la movilidad residencial como una ventaja laboral a la hora de competir por un puesto de trabajo en un mercado con altas tasas de desempleo. De esta forma, gracias a su apuesta por el alquiler como forma de vida. se diferencian del resto de candidatos que compiten por el mismo puesto.
Optando por el arrendamiento, te puedes mover y cambiar de domicilio de una ciudad o barrio a otra con gran facilidad. Sin depender de mantener una vivienda o de pagar los impuestos correspondientes, los arrendatarios pueden elegir vivir en el centro de la ciudad y si luego lo desean, pasarse a las afueras o a una ciudad menos urbanizada.
Para estas personas, el alquiler resulta una herramienta flexible y ágil. Aunque pueda ser complicada la resolución de un acuerdo de arrendamiento en caso de no haber completado el año, este caso siempre será más fácil de resolver que vender la propiedad por tener que cambiar de trabajo.
Los usuarios que se decantan por un piso o casa en alquiler, tienen la opción de destinar al completo esta cantidad de dinero al domicilio sin descontar esta cuantía para hipoteca, reformas, intereses bancarios, gastos de notaría o mobiliario.
En suma, los interesados eligen la vivienda con las características que ellos prefieran, y si no las cumple, pueden buscar otras que mejor se adapte a su demanda y a sus necesidades.
En caso de que estén sufriendo pérdidas económicas viviendo de renta, son libres de mudarse sin problema ninguno a una vivienda más barata.
Respecto a esto, resultará más sencillo negociar con el propietario del inmueble una deducción del alquiler que con el banco para disminuir la hipoteca.
Esta es la opinión que comparten las personas de 40, 50 años o más para acceder a una vivienda nueva. Estos se decantan por el alquiler, debido a que en el supuesto de fallecimiento, los herederos serán los que tengan que seguir cobrando la hipoteca.
Viviendo de alquiler, las personas pueden mudarse al centro de la ciudad, en el barrio más cercano posible a su lugar de trabajo. En esta zona, la mayoría de inmuebles están de alquiler. En suma, con el arrendamiento, la persona tiene el control de sus gastos sin tener que anticiparse a ningún susto. Sustos causados por derramas, reparaciones o tener que abonar gastos fijos.
Tras analizar los diferentes motivos obtenidos del estudio, podemos concluir que el alquiler como forma de vida no es solamente una obligación para ciertas personas sin poder adquisitivo suficiente para adquirir una vivienda, sino que es una opción atractiva para una gran parte de la sociedad.
Más info: https://www.inmonews.es/beneficios-vivir-alquiler/